Desde 2017 participamos activamente en los debates e instancias organizativas del Paro Internacional de Mujeres, Lesbianas, Travestis, Trans y No Binaries y sus movilizaciones en Córdoba. Este 8 de marzo las mujeres y diversidades que trabajamos en la UNC homenajeamos a quienes nos antecedieron en la lucha y apostamos a seguir visibilizando las injusticias que nos atraviesan para conquistar más y mejores derechos.

¡AHORA QUE SÍ NOS VEN! – MIÉRCOLES 8 DE MARZO – PARO DE MUJERES Y DIVERSIDADES

La sociedad tiene una deuda con la fuerza de trabajo más precarizada e invisibilizada

La crisis inflacionaria que atraviesa nuestra economía golpea con más dureza a quienes tenemos una posición precaria en el mercado laboral por ser responsables del cuidado y la reproducción de la familia y la comunidad. En un contexto de desigualdad económica acuciante, necesitamos políticas que garanticen el sostenimiento de la vida, con mejores condiciones laborales y paritarias que le ganen a la inflación. 

Celebramos la aprobación de la ley de moratoria previsional puesto que las mujeres y disidencias se encuentran entre la población más vulnerable en términos de su limitado acceso a la jubilación. Sabemos de la resistencia a este derecho por parte de ciertos sectores políticos, por eso velamos por su pronta puesta en vigencia. Y reclamamos la aprobación del proyecto para crear un Sistema Nacional de Cuidados con un adecuado reconocimiento salarial a quienes realizan dichas tareas.

La justicia patriarcal no vela por los derechos humanos de las mujeres y diversidades: protege los privilegios de empresarios y dueños, garantiza la concentración del poder y la riqueza. En el escenario político las cosas no son mucho más alentadoras: el mapa electoral viene dando muestras de un creciente giro reaccionario con amenazas y maniobras persecutorias que no escatiman en el uso directo de la violencia política. Resulta difícil que nuestras reivindicaciones sean atendidas cuando nuestra participación laboral, política y sindical retrocede. A 40 años de la recuperación de la democracia en nuestro país, todavía padecemos de discriminación, segregación y violencia. 

La Universidad como empleadora también está en deuda

• Seguimos reclamando la implementación del derecho a Licencia por violencia de género. Nuestra propuesta fue presentada en paritaria docente universitaria a inicios de 2018; en el marco de su tratamiento fue puesta a consideración política y técnica de otros actores universitarios como la Defensoría de la Comunidad Universitaria; la Unidad de Gestión de Políticas de Género de la UNC y la Asociación Gremial de Trabajadores de la Universidad Nacional de Córdoba para lograr un proyecto común. Recibimos múltiples sugerencias y aportes compartiendo la convicción de que construir derechos requiere del mayor consenso posible para poder reconocer, acompañar y reparar a las mujeres y disidencias que siendo trabajadoras de la UNC viven situaciones de violencia. Actualmente el régimen de licencias no contempla la posibilidad de disponer del tiempo para realizar procesos de atención institucional y judicial, tan complejos como necesarios para las víctimas. Por ello requerimos de una licencia específica, derecho que ya se reconoce en otras universidades del país y entre las trabajadoras docentes de la provincia e inclusive para estudiantes de la UNC. ¡Ya tenemos un proyecto de consenso que está a la espera de ser aprobado e implementado!
  
  
• Exigimos la aprobación y aplicación efectiva de políticas de inclusión laboral travesti-trans. Si bien nuestra casa de estudios fue pionera en el reconocimiento legal de la identidad de género autopercibida (Ordenanza 9/2011) -medida que, entre otras cosas, ha permitido incorporar en el sistema Guaraní las sexualidades no binarias- ese trabajo de reconocimiento institucional debe ser profundizado a la luz de los más recientes avances normativos. En particular, urge tomar acciones que coloquen a la UNC en el camino de la inclusión a la par de otras Universidades Nacionales que ya se han pronunciado en este sentido y de la recientemente promulgada Ley de Promoción del Acceso al Empleo Formal para personas Travestis, Transexuales y Transgénero (N° 27.636).
  
  
• Solicitamos un abordaje integral de la violencia y el acoso laboral. Sabemos de la larga experiencia de la Universidad en el abordaje de las violencias de género; pero cuando este tipo de violencia se da en el marco de relaciones laborales, requiere una mirada que integre la perspectiva de las organizaciones sindicales y el trabajo conjunto en el tratamiento del problema. Argentina ha ratificado recientemente el Convenio 190 de la Organización Internacional del Trabajo y su Recomendación 206 sobre acoso y violencia en el ámbito laboral, marco en que se reconoce el derecho de toda persona a trabajar en un ámbito libre de violencia y acoso. La vigencia legal de este acuerdo se convierte en una herramienta que nos convoca a trabajar mucho más arduamente a favor de nombrar, reconocer, prevenir y atender las situaciones de violencia laboral en todos los ámbitos de la UNC.
   
• Requerimos la implementación de políticas que atiendan a las necesidades de las y los trabajadores de la UNC con responsabilidades de cuidado. La reglamentación del art. 179 de la Ley de Contrato de Trabajo marca un horizonte para el conjunto de las y los trabajadores, que debemos tomar el reclamo por la cobertura de los costos del cuidado a cargo de las patronales. En 2014 la UNC se comprometió en paritaria a disponer fondos para un adicional por servicios de cuidado. Es hora de que la palabra se convierta en recursos y acciones concretas en resguardo de los derechos laborales. 

Por eso este #8M las mujeres y diversidades trabajadoras y
trabajadorxs de la UNC paramos y nos movilizamos

• Concentración y semaforeada – Junto a la Intersindical de Mujeres Córdoba – 11 hs – Colón y Gral. Paz
• Movilización – Junto a la red ALERTA FEMINISTA – 17 hs – Colón y General Paz

Comisión de Género – ADIUC