El Senado convirtió en ley el proyecto de financiamiento universitario. Lo celebramos como un logro colectivo, producto de la amplia y sostenida movilización social, en estos largos nueve meses de conflicto.
Frente al ya anunciado veto presidencial, tenemos el desafío de construir la fuerza necesaria para insistir con su ratificación en el Congreso.
En este sentido, y de acuerdo con los anuncios realizados ayer -en conferencia de prensa- por la mesa gremial universitaria, nos encaminamos hacia la segunda gran marcha federal universitaria.
Una respuesta unificada y contundente de toda la comunidad universitaria puede cambiar esta historia.