Comunicado de nuestra federación nacional docente, CONADU.
Las medidas electoralistas anunciadas el día de ayer por el presidente Macri frente a la grave crisis económica que causaron sus políticas, son un débil paliativo que excluye a los sectores que más necesitan la protección del estado frente a la debacle económica, como por ejemplo los jubilados.
Como sucedió en otras oportunidades, el gobierno vuelve a despreciar a les docentes y no docentes de las universidades públicas, dejándoles afuera del bono anunciado para los trabajadores del Estado Nacional. De esta forma, se discrimina nuevamente a les universitaries, tal como sucedió en 2018, perjudicando a quienes día a día sostenemos con enorme esfuerzo el funcionamiento de las universidades públicas.
Párrafo aparte merece la consideración del “aumento” del 40% de las becas PROGRESAR para les estudiantes universitaries, cuando llevaban perdido antes de la devaluación del lunes un 70% frente a la inflación en los últimos dos años. Luego del “aumento”, estas becas quedan en 2520 pesos para un estudiante que ingresa a una carrera considerada estratégica para el país.
Finalmente, en el discurso de ayer no se anunció ningún refuerzo presupuestario para el funcionamiento de las universidades, que obviamente serán duramente afectadas por la devaluación profundizando aún más la crisis presupuestaria y el desfinanciamiento que venimos denunciando desde la CONADU.
Ante esta discriminación a les universitaries y este nuevo ataque a la Universidad Pública en su conjunto, desde la CONADU, Federación Nacional de Docentes Universitarios exigimos:
- El cese de la discriminación a les trabajadores docentes y no docentes de las universidades públicas y el pago del bono anunciado para les trabajadores estatales, como complemento extra a los acuerdos paritarios alcanzados.
- Un refuerzo presupuestario de emergencia para los gastos de funcionamiento en las universidades públicas
- Un aumento real tanto en el monto como en el número de las becas PROGRESAR que permita a les estudiantes sostenerse en la Universidad Pública.
Ni la universidad pública, ni sus trabajadores somos quienes tenemos que pagar las consecuencias del saqueo financiero al que nos sometieron las políticas de cambiemos.